Cuándo un décimo de lotería compartido entre varias personas ha sido premiado, es imprescindible seguir estos pasos
Compartir un décimo de la Lotería de Navidad con amigos, familiares, compañeros de trabajo o parejas es algo de lo más habitual. No obstante, si ha sido premiado, no basta con ir al banco una o varias personas y repartir el dinero. El proceso es algo más complejo.
De hecho, si no se hace de la forma correcta, a la hora de cobrar el premio pueden aparecer una serie de problemas bastante indeseables. Vamos a explicarte los pasos que hay que seguir para pensar únicamente en qué gastar el dinero.
Paso a paso para cobrar un décimo de lotería compartido entre varias personas
Lo primero que debemos saber es que Hacienda retiene directamente el 20% del premio a partir de los 40.000 euros por cada décimo. Nunca por cada persona. Por otro lado, también has de tener en cuenta que los décimos en papel u online tienen la misma veracidad; así pues, se deben seguir los mismos pasos para cada uno.
Es importante destacar que el décimo de lotería o cualquier boleto es un documento al portador y, por lo tanto, solo podrá ser el beneficiario la persona que lo tenga en su poder. Por lo que si compartes los boletos con varias personas, lo primero que debéis hacer es una copia del décimo para cada persona participante. Después, cada fotocopia, debe tener la firma, el número del Documento Nacional de Identidad de cada persona y, además, como último paso, nunca hay que olvidarse de poner en cada copia la cantidad de dinero que juega cada uno.
En aquellos casos en los que el décimo se comparta por otros medios como WhatsApp o correos electrónicos, se deberá seguir el mismo procedimiento. Eso sí. En vez de una copia, habría que enviar la foto del décimo o del boleto con los datos del depositario, los participantes y el dinero que juega cada uno.
Cuando llega el momento de cobrar el décimo premiado, aquella persona encargada de acudir al banco debe distinguir a cada ganador con el dinero o porcentaje que juega. Posteriormente, la entidad abonaría el premio a la cuenta de la persona titular del décimo. Y, finalmente, ya lo podría repartir al resto de los jugadores sin ningún tipo de problema. En caso de que no se identifique al resto de los participantes y el propietario del boleto reparta el premio, puede parecer que lo está donando y tendría que pagar el impuesto de donaciones.