Comprar online se ha convertido en un riesgo ante las múltiples estafas que acechan internet en esta época del año.
Tanto el ‘Black Friday’, como el ‘Cyber Monday’ son dos de las fechas más esperadas por los consumidores y con las que las tiendas realizan ofertas y estrategias que dan paso a la campaña de Navidad. Cada vez más frecuente encontrar clientes que prefieren realizar sus compras online y no toparse con las colas en los centros comerciales y tiendas. Sin embargo, hay terceros involucrados que aprovechan estas fechas para cometer estafas, un problema que ha crecido mucho en los últimos años, especialmente en España.
fuente: ANSA
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Las ventas por Internet requieren de datos confidenciales como la tarjeta de crédito, que al facilitarlos para realizar una compra se ponen en amenaza. Por ello se recomienda emplear contraseñas que sean lo más suficientemente seguras y no utilizar redes Wi-Fi públicas. Las webs donde se realizan las compras cada vez están más en duda y una forma de identificarla es observar el símbolo de candado que se sitúa al inicio de la barra donde se introduce la dirección de la URL. Esta empieza por https:// o Sharp://. La letra S sugiere que la página fue cifrada y protegida con un certificado SSL. Otra de las formas para identificar el dominio es observar el nombre de la entidad, que en muchas ocasiones no existe.
También sirve de gran ayuda revisar las precauciones y políticas de privacidad en herramientas que se dedican a la comprobación como ’Google Safe Browsing’. Algunos expertos, como los ingenieros informáticos, recomiendan supervisar las actividades de la cuenta bancaria.
La técnica del ‘phising’
Se trata de una técnica de ingeniería social donde a través de correos electrónicos, suplantan la identidad de compañías, empresas, marcas y tiendas de prestigio para solicitar información personal y bancaria a los usuarios. El objetivo es claro, perseguir el engaño, cobrándose víctimas para ganar dinero fácil.
fuente: ANSA
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Para los suplantadores identidad, el ‘phising’ es la forma más sencilla realizar un ciberataque y al mismo tiempo, la más efectiva y peligrosa dónde ningún sistema operativo puede encontrar una vulnerabilidad técnica. Por muy seguros que sean los antivirus, el riesgo estará presente siempre y cuando el usuario caiga en la trampa al no percibir las ataques virtuales.
Los correos electrónicos también traen en muchas ocasiones una ciber amenaza llamada ‘phishing’. Los atacantes virtuales se dedican a enviar un e-mail y simulando ser una marca conocida. Envían un enlace para que accedas a su sitio web con unos datos que solicitan cuándo se inicia sesión y se marcan los detalles del pago. En las redes sociales también es común encontrarlos en apartados publicitarios.
