El cambio climático está empezando a afectar a todos por igual, en este caso el cambio llega con los coches de los trenes
Desde hace varios años, hemos estado inmersos en conversaciones sobre la transición hacia vehículos más sostenibles, especialmente en el ámbito de los automóviles. Sin embargo, recientemente, el horizonte de la movilidad sostenible ha ampliado sus fronteras al incluir no solo automóviles, sino también trenes. Aunque la adopción de coches eléctricos e impulsados por hidrógeno ha sido un paso importante, ahora estamos viendo el inicio de proyectos para sustituir los tradicionales trenes con vehículos ferroviarios impulsados por hidrógeno o electricidad.
En esta transformación, los autobuses han sido fundamentales, al lograr la eliminación de vehículos con motores diésel en favor de autobuses eléctricos o de hidrógeno. La atención ahora se centra en replicar este éxito en el sector ferroviario, aunque reconocemos que este proceso será gradual y requiere un gran esfuerzo.
Menos emisiones en los trenes por el cambio climático
El impulso detrás de esta transición proviene de la empresa Talgo, que ya propuso la idea hace algunos años. Sin embargo, la implementación de este proyecto ha sido posible recientemente gracias a la colaboración con gigantes del sector como Repsol y Adif, entre otras empresas españolas clave. Este grupo de empresas busca construir el primer tren de alta velocidad del mundo impulsado por hidrógeno, y el proyecto, que ahora se conoce como Hympulso, ha asegurado una subvención significativa de 6,5 millones de euros.
El principal objetivo de este cambio es lograr trenes con emisiones cercanas a cero. Hympulso representa una visión ambiciosa de un futuro ferroviario sin impacto ambiental negativo. Sin embargo, la implementación de este tren conlleva desafíos adicionales, ya que no podrá recargarse de la misma manera que los trenes convencionales. Esto implica la necesidad de desarrollar nuevas infraestructuras en las estaciones ferroviarias para permitir la recarga de estos trenes impulsados por tecnologías más limpias.
La iniciativa liderada por Talgo y respaldada por varias empresas del sector busca marcar un cambio en la movilidad sostenible al construir el primer tren de alta velocidad impulsado por hidrógeno del mundo. A medida que avanzamos hacia un futuro más limpio, este proyecto refleja el compromiso de la industria ferroviaria con la reducción de emisiones y la adopción de tecnologías más amigables con el medio ambiente.
