La jubilación que cobran los expresidentes de la Generalitat de Cataluña abre una nueva polémica en la política española.
No es un “problema” nuevo que sorprenda. Tampoco es un debate que surgió este año como gran novedad. Sin embargo, cada vez existe más enojo entre las diferencias económicas que se conocen entre los políticos y la sociedad civil. En otras palabras, ¿por qué un representante del pueblo debe tener muchos más privilegios que el ciudadano común del mismo pueblo? ¿El representante del pueblo debe parecerse a su pueblo para gobernar con más empatía y justicia? ¿Piden el voto para gobernar o piden el voto para contar con esos privilegios?
En este caso, la “nueva” discusión apareció tras conocerse lo que cobran los expresidentes de la Generalitat de Cataluña. Es decir: lo que cobran por no trabajar, luego de haber dejado el cargo y no tener más responsabilidades. Y, sobre todo, la polémica se agrandó cuando se conoció la “rica” jubilación que perciben. Rica, claro está, comparada a la mayoría de la población.
Ser expresident de la Generalitat para vivir cómodo y con lujos
Atención, no se asuste. Este es un aviso en forma de alerta: no compare su salario o su jubilación antes de enterarse lo que cobra un expresident de la Generalitat de Cataluña. La comparación podría hacerle mal. Dicho esto, vamos a la cifras concretas del mundo de la política…
Para empezar, el cobro de un expresident de la Generalitat se extiende hasta la mitad del tiempo que ha permanecido en el cargo, percibiendo el 80% de su sueldo como mandatario. Dicho de otro modo, durante ese lapso seguirá cobrando un gran salario sin trabajar. Además, como si fuera poco, pueden cobrar una pensión vitalicia, que sería el 60% de lo que ganaban cuando ejercían su función pública. En números más reales, las cifras son escandalosas. Al principio, como señalamos, cobrará el 80% de 132.856 euros al año. Esto significa que, por no trabajar, se llevará 106.284,8 euros al año, algo así como 8.857 euros brutos al mes. Encima, al cumplir los 65 años, tendrán el privilegio de jubilarse y cobrar mensualmente 6.642 euros brutos.
¿Conocen a algún ciudadano común que cobre una jubilación de 6.642 euros brutos? La respuesta, obviamente, será negativa. El enfado, entonces, se empieza a justificar. Se habla de la importancia de ser expresident de la Generalitat. ¿Y cuándo empezaremos a hablar de, por ejemplo, la importancia de trabajar 12 horas en el campo para alimentar a un país? ¿O cuándo hablaremos de los médicos que trabajan 12 horas por día para salvar vidas?
