El nuevo presidente de Argentina, Milei, ha optado por esta medida radical para salvar la economía del país y liberarlo de la gran inflación.
Milei ha llegado a la presidencia de Argentina para cambiar muchas cosas. El tiempo dirá si es para bien y para mal. Una de las cosas que más cambiará será la economía y es que el recientemente presidente argentino siempre ha asegurado que “no hay plata”. El nuevo presidente de Argentina intentará salvar la economía del país con políticas muy agresivas.
Lo primero que tiene pensado es reducir el gasto público del país cerca de 20.000 millones de dólares (una cantidad que está cerca de suponer el 5% del Producto Interior Bruto del país). Esta fuerte recorte se hará despidiendo a los funcionarios que llevan menos de un año en sus cargos, reduciendo los subsidios para energía y transporte y la cancelación de la publicidad gubernamental en prensa. Sin embargo, no será las únicas. Luis Caputo, ministro de economía argentino del gobierno de Milei, devaluó esta semana la moneda argentina el 50%. Esto supone que la divisa sudamericana pierda su valor respecto al dólar estadounidense. Es decir, este miércoles el dólar valía 366 pesos argentino, pero tras la entrada en rigor de esta acción económica vale 800 pesos. Y, ¿cómo afectará esto al país?
Milei, una medida radical y el futuro de Argentina
Según el Banco Santander, el poder adquisitivo de los ciudadanos pierde el mismo valor que la moneda devaluada. La explicación es muy sencilla: necesitas más dinero para comprar los mismo productos ya que la moneda tiene menos valor. Además, los salarios y los ahorros guardados en pesos argentinos es posible que también pierdan valor.
No todo es negativo. Y es que en los países que sufran una devaluación así son muy interesantes para los extranjeros por diversos motivos. Por ejemplo, el turismo se ve incentivado ya que el tipo de cambio es favorable para los extranjeros. Lo mismo ocurre con las remesas, que ganan valor y así crece el dinero que llega de otros países con una divisa más fuerte. Por último, las exportaciones aumentan porque el producto nacional tiene un precio más apetecible para otros países. Pero a cambio, las importaciones suben de precio.
El Gobierno de Milei tomó la decisión de devaluar su moneda para cambiarla situación de hiperinflación en la que lleva inmerso el país desde hace más de diez años. En palabras del ministro de Economía, Argentina tiene que hacer frente “a la peor herencia de nuestra historia” que puede llegar a provocar un nivel de hiperinflación anual del 15.000%, según fuentes gubernamentales. “Para que se entienda eso en números que todo el mundo entiendo, hablamos de que una leche valga 400 pesos a 60.000 pesos en el lapso de un año. Nuestra misión es salvar al país de esta catástrofe”, afirmó Caputo.
