Se intuía que este Gobierno de Pedro Sánchez no sería sencillo: ahora se ha conocido un nuevo conflicto que le afecta directamente
Una de las principales proclama en la campaña de Pedro Sánchez, el ‘decreto anticrisis’, está muy lejos de hacerse realidad al no contar, de momento, con el suficiente apoyo parlamentario para que salga adelante. Y es que uno de los principales socios del PSOE para que se hiciese con el gobierno ha confirmado que, de momento, no votará a favor.
Junts ha reiterado que votará en contra de este decreto aunque siguen dispuestos a negociar con el Ejecutivo al que ayudó a llegar a la Moncloa. Entre las propuestas presentadas por el partido independentista está la de incluir beneficios fiscales para las empresas que regresen a Cataluña y sanciones para aquellas que no lo hagan. Una medida muy criticada por las empresas y los demócratas.
Pilar Alegría, ministra portavoz de Pedro Sánchez, ya ha asegurado que el objetivo del gobierno es «garantizar la seguridad jurídica» de las empresas dentro del respeto a la Ley de Sociedades del Capital. Según El País, la solución del Ejecutivo sería la de dar incentivos fiscales a las empresas que migrasen a tierras catalanas y no sanciones claudicando a los intereses soberanistas.
La huida de Caixabank, Sabadell y Catalana Occidente: el nuevo conflicto de Pedro Sánchez
Esta reivindicación no es la única de los independentistas. Hay otras como son no aumentar el IVA a la energía, eliminar los impuestos a la producción de aceite o aumentar la partida de los fondos europeos (de 10% a 16%) para la digitalización de la Justicia en Cataluña, según publica ElDiario.es.
Muchas fueron las empresas que huyeron de Cataluña durante el proceso independentista que finalizó en 2022. Desde entidades financieras hasta compañías de seguros, pasando también por energéticas o de la industria de la alimentación abandonaron la región. Algunas de las más famosas fueron Caixabank, que trasladó la sede de su Fundación a Palma y su sede social a Valencia.