Ahorrar en las comidas navideñas es posible con planificación y previsión, especialmente con los productos que antes se acaban.
Se acerca la Navidad y como es tradición viene acompañada de numerosas comidas y cenas en familia. Si este año te ha tocado ser invitado enhorabuena, no tienes nada por lo que preocuparte. Pero si por el contrario, te ha tocado ser anfitrión este artículo te interesa, porque amigo lector no lo tienes nada fácil. Y es que si a los gastos típicos de estas fechas, regalos, comida, suministros…, etc., le añadimos la inflación y la subida del IPC (Índice de Precios de Consumo), el resultado es un coste bastante alto en la lista de la compra navideña.
Llegados a este punto y medida que nos acercamos a la temporada de Navidad es muy importante una buena planificación y previsión en las compras. Especialmente en aquellos productos más demandados en estas fechas y que suelen acabarse fácilmente o incluso aumentar su coste debido a la baja oferta. Hablamos de productos como el marisco, el champagne, la carne o algunos dulces.
Algunos productos muy consumidos en estas fiestas podemos comprarlos con antelación para evitar el desabastecimiento y la consiguiente subida de precios, evitándonos también las sorpresas de última hora. Suelen ser productos no perecederos o de fácil conservación en el congelador y que sumados en su totalidad puede suponer un ahorro considerable en nuestra lista de la compra navideña.
Productos como el marisco y el pescado suelen encarecerse hasta un 10% más en semanas previas a esta celebración, según datos del INE (Instituto Nacional de Estadística) . Estos alimentos son tradicionales de estas festividades y fácilmente conservables en nuestro congeladores. Adelanta su compra unas cuantas semanas y notarás la diferencia de precios.
Por otro lado las bebidas como el champagne, el cava, el vino u otros licores también reciben una notable subida de entorno al 9%. Aprovecha las ofertas y descuentos de estos productos durante estas semanas, además adelantarte a su compra también te permitirá elegir los de mejor calidad y precios más bajos.
Si planeas servir pollo, cordero, cerdo u otro tipo de carnes en tus comidas o cenas, te aconsejamos que comprarlos también con antelación y congelarlos. Esto te permitirá evitar la escasez y subida de precios, pues en la semana previa a Navidad aumentan un 15% sus costes.
Dulces, chocolates y turrones se llevan la peor parte. Según los datos del INE el azúcar aumenta hasta un 50% en los meses de noviembre y diciembre. Teniendo en cuenta que cada vez los supermercados comienzan cada año antes a servir el turrón y los polvorones, no debe suponernos ningún problema comprarlos con antelación. Pues son productos que se conservan bien en lugares frescos y secos.
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