La situación en el mar Rojo se confirma como una gran amenaza para la economía española en estos momentos: las previsiones no son buenas
No están siendo buenos tiempos a nivel mundial. Los continuos conflictos bélicos están lastrando, y de qué manera, las previsiones de crecimiento económico en todo el planeta. La situación en la guerra entre Rusia y Ucrania puede desembocar también en un problema mayor debido a la entrada de Suecia en la OTAN. Por otro lado, y es quizá el asunto más peliagudo, está el drama entre Israel y Palestina. Este conflicto se puede extender a más territorios de forma inminente.
Es evidente que tanto Israel como Palestina tienen potentes aliados a nivel mundial. Los primeros están más cerca de Occidente que nunca. Estados Unidos y Reino Unido están decididos a ayudar al país de mayoría judía en estos momentos. Por otro lado, Gaza y Cisjordania, territorios que forman Palestina, tienen aliados como Arabia Saudí, Irán y el resto de países árabes de la zona. Es por ese motivo por el que la posibilidad de un conflicto bélico a nivel mundial no se antoja nada disparatado en estos momentos de tensión internacional. En este caso no vamos a centrar la atención en esa posibilidad y sí en la economía española.
El mar Rojo amenaza la economía española como nunca: te explicamos los motivos
El riesgo a una recesión en Europa es más latente que nunca. La clave de todo está en el comercio que transita por el mar Rojo. A nivel mundial, el 12% pasa por esta ruta, o mejor dicho pasaba debido a los ataques de las milicias de Yemen. El país ha entrado en una batalla complicada con países como Estados Unidos y Reino Unido, que siguen intentando que la situación comercial no derive en un conflicto mayor.
España aún no se ha puesto del lado norteamericano y británico. Tal y como ha confirmado la Confederación Española de Comercio (CEC), el país del sur de Europa aún no ha notado los retrasos en las mercancías. Este hecho es positivo en cualquier prisma, pero también es cierto que podría cambiar en el futuro. Las navieras están depositando sus mercancías en puntos intermedios, a los que acuden barcos más pequeños. Este contexto hace prever escenarios complicados a nivel mundial. Por otro lado, España tiene en Asia a uno de sus grandes aliados a nivel comercial, de ahí que esta relación se pueda resentir por este conflicto en las rutas internacionales.
Lo que sí se está viendo afectado ya es el precio del petróleo, y todo indica que irá a más. La tensión internacional es tremenda, por lo que si no hay solución inminente, esta escalada de precios se podría acelerar en los próximos meses. La economía española sí que se ha visto afectada en determinadas empresas como Michelin, que ha parado sus plantas de fabricación en ciudades como Valladolid y Aranda de Duero.